martes, 6 de mayo de 2008

El Día D, la Hora H

Si tuviéramos que hacer un ranking con la efeméride más cursi del calendario, sin ninguna duda saldría en el primer puesto por mayoría absoluta, el 14 de febrero. El “Día de los Enamorados”, fecha que siempre he odiado y odio por los más variopintos motivos. Pues mira que no hay días en el año, y yo tuve que elegir precisamente un 14 de febrero para dar un cambio radical a la manera de vivir mi sexualidad ¡Manda Huevos!. Aparte de este detalle tan cursi, hay otro que hace aún más raro mi Día D, y es que me tuve que ir a 10.000 kilómetros de mi casa para experimentar con alguien de mi mismo sexo (Ya se que alguno pensará aquello de: ¡Pues anda que no le salió caro el polvo…!, pero es que por circunstancias de la vida pasé un año en Costa Rica y ya se sabe… caribe, calor y noche es igual a ¿malas intenciones?).

Así que partiendo de estas dos circunstancias, la una cursi como ella sola, y la otra da el toque exótico a esta historia, ocurrió mi Día D. Y gracias a Internet (herramienta a la que dedicaré varios posts y que muchos de vosotros ya conocéis y no precisamente para hacer tests de autoescuela o para perder el tiempo leyendo blogs como este) conocí a un “tico” muy majo que puede considerarse como mi iniciador en esta nueva etapa de mi vida. Parece ser que en mi afán de experimentar “contraté” el kit completo del gay primerizo, a saber: Primer beso con un chico, primera vez en ir a un sitio de ambiente, y primera vez en … con un tío… ya os lo imagináis.

Y allí estaba yo, un 14 de febrero, con un chico que había conocido en Internet y que me había invitado a cenar, en un bar gay del Tercer Mundo mientras dos Drag Queens interpretaban la canción principal de la Banda Sonora de la película La Sirenita disfrazados – muy logrado todo hay que decirlo – de Ariel y Ursula respectivamente (Esto es terapia de choque y lo demás son tonterías). Cómo supondréis me sentía más fuera de lugar que George Bush en “Saber y Ganar”, a mis 24 años – en aquél entonces – lo más cercano que había estado de una Drag, era en las clases de mi profesora de Derecho Laboral (era una tía, pero nadie lo diría y yo no pondría la mano en el fuego), y tampoco había estado nunca en un bar gay. Tras mi primera impresión, un par de cervezas, y sobre todo después de comprobar que efectivamente el besar a un hombre no solo no me resultaba rechazable sino que me gustaba, y mucho, me relajé y pude disfrutar del momento de ser consciente de que había roto muchas barreras y temores esa noche (aunque para miedo el del Drag vestido de Ursula con sus tentáculos y su peluca gris).

Y la noche acabó como tenía que acabar, para redondear todas esas cosas que había hecho por primera vez, y no me estoy refiriendo a tirarme en paracaídas o practicar equitación (bueno esto último puede tener algún tipo de analogía, pero ¡saciad vuestra curiosidad morbosa de otra forma!). Así que a partir de ese día cómo comprenderéis ya miro los 14 de febrero con otra perspectiva.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

yo quiero detalles morbosos... qué pasó realmente ese 14 de febrero.. vamos ver... que aquí nadie nos lee... ni saben quienes somos jajaja XD

Tú fuiste más warri que yo ehh jajaja yo quedé varias veces antes de hacer algo jajaja pero bueno.. entre tú y yo... sabes que eres más adelantado XD y en nº tb ;)

Pues nada, a seguir así que hay muchos tíos esperándoteee! :P

besis

Antonio

Anónimo dijo...

jajaja! ¿no querías sopa? ¡¡pues toma dos tazas!! Eso para que luego te quejes de san valentín!

Muy interesante el blog, y muy fresco, espero que lo mantengas al día, no como yoooo!!! Y que nos cuentes de donde eres y esas cosas, que si eres de donde yo podemos vernos y exar unas cervecitas, en plan "beers&blogs" pero a nuestra manera! jaja

¡Venga, un saludo!

Guanacasteco dijo...

Antonio tu calla... que si hablamos de números.. vas tu muy bien situado :P. Así que yo de adelantado nada... con 24 años! anda que...

Bm muchas gracias por pasarte por mi blog ¿cual es el tuyo? así le echo un vistazo. Espero dedicarle algo de tiempo y actualizarlo!. Y esas cercvecitas si somos de la misma ciudad me apunto! jaja vivo en sevilla.

Un saludo!

Anónimo dijo...

jajaja! pero si lo tienes enlazado so loco! "Soy gay, ¿y qué?" Yo de Granada, así que si te pasas por la ciudad del embrujo, ya sabes, ¡avisa!

Guanacasteco dijo...

Ahhh vale vale! si es que no me entero. Por cierto me gusta tu blog, y los últimos post me siento bastante identificado! :P

Y a Granada voy bastante, tengo amigos y estuve un año estudiando allí. Lo mismo te digo si vienes por Sevilla... Avisa!

Anónimo dijo...

vaya historia chula chaval!!! eso es kitarse tabues en un plis!!! Quizás mucho más facil que las dudas existenciales que se tienen hasta que uno da el paso a enfrentarse con el mundo gay.

me ha gustao este blog, lo visitaré a menudo, besos!;)

Guanacasteco dijo...

Jeje la verdad es que fue una terapia de choque, pero resultó positiva la verdad. Y siempre me queda el buen recuerdo de aquella noche surrealista jeje.

Y muchas gracias por pasarte por mi blog de vez en cuando!. Un beso

Fearn dijo...

No esta nada mal como terapia de choque XDD. Pues sere un bicho raro o algo pero a mi no me van los locales de ambiente, es como cualquier hetero que va a una discoteca a ligar, es todo muy artificial la gente va con "intenciones concretas" llegas y alli estan la mitad: hola muy buenas y directamente al lio. Las pocas veces que he ido a algun local de ambiente he estado poco rato y me he largado, porque no me ha gustado nada lo que veia alli. No se, creo mas en las casualidades de las situaciones cotidianas.